sábado, 15 de diciembre de 2012

EL SOCIALISMO DEL SIGLO XXI DE HUGO CHAVEZ FRIAS


EL SOCIALISMO DEL SIGLO XXI DE HUGO CHAVEZ FRIAS
RESUMEN:
El propósito en general es construir una sociedad sin clases, razón por la cual en la actualidad la mayoría del socialismo se identifica con los postulados marxistas y comunistas. También se ha enfocado últimamente a las reformas sociales de las democracias modernas.
Para Hugo Chávez expresa lo siguiente "Hemos asumido el compromiso de dirigir la Revolución Bolivariana hacia el socialismo y contribuir a la senda del socialismo, un socialismo del siglo XXI que se basa en la solidaridad, en la fraternidad, en el amor, en la libertad y en la igualdad" en un discurso a mediados de 2006. Además, este socialismo no está predefinido. Más bien, dijo Chávez "debemos transformar el modo de capital y avanzar hacia un nuevo socialismo que se debe construir cada día".
INTRODUCCIÓN
El Socialismo del siglo XXI es un concepto del que se empieza a hablar a partir de enero de 2005, fue lanzado por el Presidente de Venezuela, Hugo Chávez, en el V Foro Social Mundial, en el marco de la revolución bolivariana, en su definición ha señalado que para llegar a éste habrá una etapa de transición que denomina como Democracia Revolucionaria.
Hugo Chávez expresó "Hemos asumido el compromiso de dirigir la Revolución Bolivariana hacia el socialismo y contribuir a la senda del socialismo, un socialismo del siglo XXI que se basa en la solidaridad, en la fraternidad, en el amor, en la libertad y en la igualdad" en un discurso a mediados de 2006. Además, este socialismo no está predefinido. Más bien, dijo Chávez "debemos transformar el modo de capital y avanzar hacia un nuevo socialismo que se debe construir cada día".A su juicio por las condiciones presentes en el actual mundo globalizado, esta transición será bastante prolongada. Dentro de este concepto sería definitivamente el socialismo el camino a seguir, contrario al neoliberalismo.
En el aspecto de ideológico y en cuanto al objetivo de la vida social, se ha llegado a determinar a qué tipo de socialismo se apunta, se ha aclarado relativamante cuando Hugo Chávez respondió a la jerarquía eclesiástica venezolana «Les recomiendo a los obispos que lean a Marx, a Lenin, que vayan a buscar la Biblia para que vean el Socialismo en sus líneas, en el viejo y nuevo testamento, en el sermón de la montaña.», durante el acto de juramentación de su nuevo gabinete ministerial, el 8 de enero de 2007.

En el mismo acto, Chávez indicó ser trotskista. Por esto se podría inferir que el Socialismo del siglo XXI posee elementos de ideologías tan diversas como el Marxismo-Leninismo, el trotskismo y el socialismo cristiano, aunque preservando prácticas del neoliberalismo tal como lo ha demostrado el proceso de concesiones de las empresas estatales a transnacionales privadas.
EL SOCIALISMO DEL SIGLO XXI
¿Qué es el socialismo?
El socialismo es una ideología política que designa aquellas teorías y acciones políticas que defienden un sistema económico y político, basado en la propiedad y administración de los sistemas de producción y en el control social (parcial o completo) de los sectores económicos y políticos. Sin embargo, en la práctica el significado de facto del socialismo ha ido cambiando con el transcurso del tiempo.
Aunque es un término político bastante cargado, permanece fuertemente vinculado con el establecimiento de una clase trabajadora organizada, creada ya sea mediante revolución o evolución social, con el propósito de construir una sociedad sin clases, razón por la cual en la actualidad la mayoría del socialismo se identifica con los postulados marxistas y comunistas.
También se ha enfocado últimamente a las reformas sociales de las democracias modernas. El concepto y término socialista se refieren a un grupo de ideologías, un sistema económico o un Estado que existe o existió.
Historia del Socialismo
El estudio del socialismo propiamente dicho suele iniciarse a partir de la Revolución Francesa en 1789, que supuso el derrocamiento de la clase feudal francesa y la ascensión al poder de la burguesía, y el período premarxista en la historia del socialismo, corresponde a los cien años aproximadamente (de mediados del siglo XVIII a mediados del siglo XIX) en los que los principales países de Europa desarrollan el proceso de sustitución del feudalismo por el capitalismo como sistema económico, y en el que los estados feudales se unen para formar las modernas Naciones-Estado.
A raíz de la Revolución Francesa, aparece François Babeuf, el primer pensador socialista (aunque en su época esta palabra no se utilizaba todavía) que se pone a la cabeza de un movimiento llamado la Conspiración de los Iguales.
Por su parte Inglaterra fue la cuna del socialismo utópico y reformador en la primera mitad del siglo XIX. Existen dos causas importantes que dan al socialismo utópico inglés su carácter peculiar: la revolución industrial con su cortejo de miserias para el naciente Proletariado y el desarrollo de una nueva rama de la ciencia : la economía política. Recordemos entre los socialistas utópicos a Robert Owen (1771-1858), que fue el primero en considerar al proletariado como clase independiente con intereses comunes.
En Francia el utopismo tuvo un carácter más filosófico que en Inglaterra. Su primer representante fue el conde Henri de Saint-Simon (1760-1825). Propuso la Federación de Estados Europeos, como instrumento político para evitar las guerras y asegurar la paz mundial. Al mismo tiempo Carlos Fourier, (1772-1837), concibió los falansterios-comunidades humanas regidas por normas de libre acuerdo y economía socializada. De la inspiración de los principios fourieristas se constituyeron algunos falansterios. Otro utopista francés fue Étienne Cabet (1778-1856), que durante su destierro en Inglaterra, en el año 1842, escribió Viaje a Icaria.
Poco después aparece la teoría marxista que se refiere a la sociedad que debe sustituir al capitalismo, y en algunos casos desarrollarse en comunismo. El marxismo y comunismo son dos ramas muy específicas del socialismo. Las dos no representan al socialismo como un todo. Entre los marxistas hubo una división entre los socialistas democráticos y los revolucionarios. En la teoría moderna del socialismo democrático, se aspira a llegar a una sociedad democrática que sea la columna vertebral de un Estado de bienestar.
El socialismo libertario es una corriente del socialismo que busca que las personas decidan sobre sus vidas directamente, y en el caso del anarquismo propugna la abolición del Estado y de toda autoridad. Es la corriente con un trasfondo de respeto y valoración al sujeto o individuo, y que considera a la libertad como el camino y el objetivo del socialismo y que propone la horizontalidad en las relaciones humanas, la autonomía local junto con la autoorganización de los movimientos sociales frente a las instituciones del Estado y a las multinacionales y monopolios propios del capitalismo. La meta del socialismo libertario es construir una sociedad basada en las libertades civiles, la equidad social, la iniciativa individual, la cooperación voluntaria, eliminando las clases sociales estratificadas, promoviendo estructuras políticas y económicas autogestionarias, descentralizadas o distribuídas.
Una ideología, un grupo de ideologías
Existen algunas grandes diferencias entre los grupos socialistas, aunque casi todos están de acuerdo de que están unidos por una historia en común que tiene sus raíces en el siglo XIX y el siglo XX, entre las luchas de los trabajadores industriales y agricultores, operando de acuerdo a los principios de solidaridad y vocación a una sociedad igualitaria, con una economía que pueda, desde sus puntos de vista, servir a la amplia población en vez de a unos cuantos.
De acuerdo con los autores marxistas (más notablemente Friedrich Engels), los modelos y las ideas socialistas serían rastreables los principios de la historia social humana, siendo una característica de la naturaleza humana y los modelos sociales humanos.
En el marxismo-leninismo el socialismo es considerado como la fase previa al comunismo, por ello los procesos revolucionarios vividos por la URSS, Cuba y China se relacionan con esta doctrina, ya que, en el caso de la URSS nunca se logró alcanzar el comunismo, y en el caso de Cuba todavía se lucha para alcanzar ese objetivo.
Presidente Chávez define Socialismo del siglo XXI
El Presidente Chávez formuló su pensamiento sobre el Socialismo del Siglo XXI.
Confiesa que para él sólo el Socialismo puede traer justicia social.
El primer elemento que dibuja sobre el Socialismo del siglo XXI es su estrecha relación con la practica política que comenzó allá por los años 80 con el diseño de lo que llamaron el 'árbol de las tres raíces', que es la fuente ideológica. Consiste en la raíz bolivariana (su planteamiento de igualdad y libertad, y su visión geopolítica de integración de América Latina); la raíz zamorana (por Ezequiel Zamora, el general del pueblo soberano y de la unidad cívico-militar) y la raíz robinsoniana (por Simón Rodríguez, el maestro de Bolívar, el Robinson, el sabio de la educación popular, la libertad y la igualdad). Este 'árbol de las tres raíces' da sustancia ideológica al movimiento revolucionario y al Socialismo del siglo XXI.
En esta larga experiencia la conciencia y el pensamiento del Presidente Chávez ha recibido también la influencia del Marxismo Referencia ineludible del socialismo moderno. Señala que el de ahora debe ser un Socialismo nuevo. El 'Socialismo del siglo XXI', sobre el cual esboza ideas precisas.
Una es afirmar que el primer socialista de nuestra era fue Cristo. El Socialismo debe nutrirse de las corrientes más auténticas del cristianismo. Haremos el Socialismo desde nuestras propias raíces, desde nuestros aborígenes y cita experiencias como: 1) las comunas en Paraguay y Brasil; 2) el socialismo utópico que representó Simón Rodríguez; 3) el planteamiento de Bolívar de libertad e igualdad; 4) los planteamientos de Artigas, el gran uruguayo, de que hay que invertir el orden de la justicia, eliminando los privilegios.
Entre los elementos que pudieran definir el Socialismo del siglo XXI, dice el Presidente Chávez, están los siguientes:
a) La moral.
El primer rasgo es el moral. Debemos recuperar el sentido ético de la vida. Luchar contra los demonios que sembró el capitalismo: individualismo, egoísmo, odio, privilegios. Es un arma en la lucha contra la corrupción, un mal que es propio del capitalismo. El socialismo debe defender la ética, la generosidad.
b) La democracia participativa.
En el aspecto político uno de los factores determinantes del Socialismo del siglo XXI debe ser la democracia participativa y protagónica. El poder popular. Hay que centrar todo en el pueblo, el partido debe estar subordinado al pueblo.
c) Igualdad conjugada con la libertad.
En lo social, el Socialismo debe conjugar igualdad con libertad. Una sociedad de incluidos, de iguales, sin privilegios.
d) Cooperativismo y asociativismo.
En lo económico: un cambio del sistema de funcionamiento metabólico del capital. En Venezuela se han iniciado experimentos como el impulso al cooperativismo, al asociativismo, a la propiedad colectiva, a la banca popular y núcleos de desarrollo endógeno. Son válidas muchas experiencias como la autogestión y cogestión, la propiedad cooperativa y colectiva. Se esta poniendo en marcha un ensayo de empresas de producción social y unidades de producción comunitaria.
El Socialismo del Siglo XXI ofrece como su mejor resultado hasta el momento, un impresionante experimento de PODER POPULAR en el que participan millones de personas, como no lo habían hecho antes en la historia de la nación, contagiando el resto de los pueblos suramericanos que han vuelto su mirada al modelo socialista ante el estrepitoso fracaso del neoliberalismo.
A las anteriores reflexiones el Presidente agrega la siguiente: estamos en una transición. Una transición que llama 'Democracia Revolucionaria'. Ha retomado ese término para caracterizar el tipo de democracia que empuja como una caballería, que abre puertas y se impregna de pueblo. Es una fase de transición hacia el socialismo.
El Presidente propone redactar con estas ideas el Manifiesto del Socialismo del Siglo XXI. Con otros camaradas hemos tomado la determinación de avanzar en esa dirección. Para tal efecto ha sido creado el Instituto del Pensamiento del Socialismo del Siglo XXI, donde se profundizaran todos estos elementos y se difundirán entre las organizaciones populares, para elevar así su nivel de conciencia y acción revolucionaria.
El socialismo del siglo XXI fue forjado en Cuba
En Cuba se instaura un Estado Socialista a partir de 1959, con base en los principios del marxismo-leninismo, que consagra al Estado socialista, y al Partido Comunista como herramienta fundamental en orden a la obtención de los fines perseguidos, y en la cual se observan algunas influencias, formales y substanciales de las Constituciones de la República Popular China, de la Unión Soviética y de las entonces repúblicas socialistas-marxistas de Alemania, Rumania y Checoslovaquia.
El propósito que animaba a la mayoría de la oposición cubana durante la lucha contra la dictadura de Batista, era el regreso a la democracia y la restitución de la Constitución de 1940, inspirada en la de la república española, en la alemana de Weimar y en la mexicana de 1917, de allí que se le considerara la más progresista del continente, Por cierto redactada y puesta en vigor durante el primer gobierno de Batista, quién además de legalizar el Partido Comunista, dispuso que dos altos miembros de éste formaron parte de su gabinete. Asesinada por el propio Fulgencio Batista tras el golpe de Estado de 1952 que quiebra el proceso civilista y democrático: fractura a la que Fidel Castro dio continuidad. Pero, tras la toma de poder de 1959, ante la imposibilidad del castrismo de declararla "moribunda", se procede de inmediato a su modificación: imposición de la pena de muerte; se decreta la retroactividad de la Ley Penal; y se suspende el derecho de Habeas Corpus.
Las modificaciones continúan sucediéndose hasta que en 1976 se promulga una nueva Constitución que finalmente deroga a la de 1940. Un caso único en la historia constitucional del continente, y una demostración del colonialismo voluntario: la Constitución recoge en su texto la gratitud cubana a la URSS. Fue el período de mayor identificación con el modelo soviético. La alianza entre ambos, tomaba así la forma de un matrimonio indestructible.
La fase de la institucionalización de la revolución, designa el año 1977 como "Año de la institucionalización". Se comienza el proceso de elección de los representantes del poder popular, se fija una candidatura única, apoyada por un solo partido, el Partido Comunista de Cuba. Fidel Castro es elegido Presidente del Consejo de Estado. Se eligen los miembros de los Consejos Municipales, y los diputados a la Asamblea Nacional del Poder Popular. Se procede a una nueva división territorial de la isla. Desaparecen provincias, aparecen otras que llevan los nombres del nuevo panteón épico revolucionario.
Cuba se rigió según esas mismas normas constitucionales hasta el colapso de la URSS, cuando se vio obligada a iniciar un proceso de reformas legislativas para adaptar el sistema institucional al contexto de la Post Guerra Fría. El principio rector de un régimen totalitario comunista se mantiene en el nuevo texto constitucional que establece que el Partido Comunista es "la fuerza dirigente superior de la sociedad y del socialismo y el avance hacia la sociedad comunista".
No obstante aparecen cambios sutiles en lugar de ser "la vanguardia organizada marxista-leninista de la clase obrera", los lineamientos se orientan hacia la defensa del patrimonio nacional surgido de la revolución cubana, se pone el acento en el principio de soberanía, se le da mayor visibilidad al nombre de José Martí. Se impone el nacionalismo revolucionario por sobre la adhesión al marxismo-leninismo. Se decreta la Declaración de los mambis del siglo XX, firmada por más de 250.000 oficiales de la FAR y la Declaración y la Ley de Dignidad y Soberanía Cubana.
Los desplazamientos retóricos – nacionalistas no significan el abandono del socialismo y del partido único, sino que el socialismo es convertido en un valor nacional. El sentido de pertenencia nacional comporta el sentido anti-capitalista. Es así como, la modificación constitucional "propuesta" a la Asamblea nacional del poder popular por las organizaciones de masa, enteramente subordinadas al partido comunista, mediante la tan útil y rentable cláusula constitucional del referéndum, consagro el socialismo como sistema social irrevocable.
Esa fue la respuesta a la iniciativa de reforma constitucional de un grupo opositor pacifista, el llamado Proyecto Varela, que en 2002 invocando la misma cláusula, pese a la represión policial, había recogido 11.000 firmas estipuladas por la Constitución. Ante los 8.198.237 que dijeron "si al socialismo irrevocable"…
Esta nueva fase ambigua del régimen cubano, es la inspiradora del llamado Socialismo del Siglo XXI; de allí la facultad de asirlo con los únicos instrumentos teóricos del marxismo, o del leninismo. Es un artefacto mestizo, muy similar a un altar del culto de María Lienza o también similar a la hallaca.
Como dice Meter Sloterdijk: se ha condenado por ley el fascismo, pero mientras se continúe admitiendo la auto-amnistía de los crímenes de la izquierda, continuaremos bajo el imperio de la ignorancia ingenua de unos y de la mala fe de otros. Ésa cláusula constitucional aún no ha sido prevista por ninguna constitución.

Entre los principios fundamentales de la constitución Cubana podemos extraer:
Principios Políticos:
- Se consagra el poder carismático del líder, en este caso de Fidel Castro.
- Se ratifican los principios de la revolución.
- El establecimiento de una sociedad socialista.
- Aceptación e implantación de marxismo-leninismo.
- Rectoría del Partido Comunista en la construcción del socialismo y el avance hacia la sociedad comunista.
- Atribución del poder del Estado a los trabajadores.
- Fidelidad a la Unión Soviética e integración al mundo socialista.
- Condena al imperialismo y solidaridad antiimperialista.
- Condena a la guerra de agresión y reconocimiento de las guerras de liberación nacional y la resistencia armada
- Propósitos de paz y de integración regional.
Principios Sociales:
- Se le rinde culto a José Martí.
- La libertad individual. ***
- Inviolabilidad de la integridad personal ***
- Libertad de expresión y religiosa. ***
- Derecho de reunión, asociación y manifestación. ***
- Reconocimiento del derecho de asilo bajo ciertas condiciones.
- Defensa del medio ambiente.
- Protección de las instituciones familiares, la niñez, la juventud, la vejez, el desamparo y la salud.
- Consagración de la igualdad jurídica de los hijos y garantía de reconocimiento de la paternidad.
- Derecho a la educación integral.
- Eliminación de la educación privada.
- Adoctrinamiento comunista en las nuevas generaciones.
- Gratuidad de la enseñanza.
- Sometimiento a la creación artística a criterios revolucionarios.
- Igualdad jurídica y social de los ciudadanos.
- Igualdad jurídica del trabajo.
- Igualdad jurídica, económica, política, social y familiar de la mujer.
- Enaltecimiento del trabajo.
- Consagración del trabajo voluntario como formador de la conciencia comunista.
- Condicionamiento general del ejercicio de las libertades reconocidas a la existencia y fines del Estado -
- Socialista y a la construcción del socialismo y del comunismo.
- Derecho de petición
- Defensa de la patria socialista como deber y honor.
- Fomento y promoción de la cultura física y el deporte. (Si no a Cortar Caña)
- Promoción de la participación ciudadana en el campo educativo y cultural.
Principios Económicos:
- Concepción Socialista de la economía basada en la propiedad socialista de todo pueblo sobre los medios de producción fundamentales.
- Supresión de la explotación del hombre por el hombre.
- Ejercicio de la soberanía sobre los recursos naturales del espacio marítimo
- Reconocimiento de ciertas formas de propiedad privada.
Prohibición del arrendamiento y otras formas de explotación de la propiedad de agricultores pequeños sobre fincas rústicas.
- Reconocimiento de la propiedad colectiva campesina.
- Reconocimiento del derecho a la herencia.
- Confiscación de bienes exclusivamente como sanción.
- Desde 1991 Cuba a permitido la apertura al capital extranjero bajo la condición de empresas mixtas.
La concepción del Estado socialista en la constitución cubana, es el de un instrumento de que se vale el pueblo trabajador para ejercer el poder, este poder a su vez, se sustenta en la alianza de la clase obrera con los campesinos y las demás capas trabajadoras de la ciudad y el campo, bajo la dirección de la clase obrera. El partido comunista es la fuerza dirigente superior del Estado, ya que se le entiende como la "vanguardia organizada marxista-leninista de la clase obrera, que organiza y orienta los esfuerzos comunes hacia los altos fines de la construcción del socialismo y el avance hacia el futuro comunista".
Cinco motores constituyentes para construir el socialismo, propuso Chávez al tomar posesión
Primer Motor: Ley Habilitante. Vía directa al socialismo
Segundo Motor: Reforma Constitucional. Estado de derecho socialista
Tercer Motor: Moral y Luces. Educación con valores socialistas
Cuarto Motor: La Nueva Geometría del poder. El reordenamiento socialista
de la geopolítica de la Nación
Quinto Motor: Explosión del Poder Comunal. Democracia protagónica,
REVOLUCIONARIA Y SOCIALISTA
Con la intención de continuar el camino acertado del Poder Constituyente que despertó en 1999, el presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Hugo Chávez Frías, propuso lo que denominó como los "cinco motores constituyentes" para avanzar hacia el socialismo del siglo XXI.
Durante su discurso, luego de ser investido para su segundo período presidencial, Chávez explicó que el primer eje contempla la propuesta de la "Ley Habilitante", que permitirá al Ejecutivo legislar sobre las materias necesarias para adelantar los cambios hacia el socialismo. El presidente Chávez solicitó facultades para legislar en 10 áreas de carácter estratégico, entre las cuales destacan la economía, finanzas, actividad social, cultura, seguridad y defensa.
Según expertos, la Ley Habilitante tendrá una vigencia de 18 meses a partir de su publicación en la Gaceta Oficial y concede al estadista las facultades para aprobar decretos y normativas con rango y fuerza de ley.
El vicepresidente del país, Jorge Rodríguez, adelantó que en un plazo de tres meses estarán redactados y modificados todos los instrumentos legales del citado mecanismo. Rodríguez estimó que en el marco de la Habilitante se elaborarán entre 40 y 60 leyes, con vistas a impulsar la construcción del nuevo proyecto nacional de carácter socialista.
En el ámbito financiero, el propósito esta en profundizar y adecuar el sistema financiero público y privado a los principios constitucionales, apoyado en la modernización del marco regulatorio para los sectores monetario, banca, seguros, tributario e impositivo. Asimismo, en materia de economía se dictarán regulaciones que preserven la función social de la propiedad -en sus diversas formas y clases-, así como el fomento de la producción y desarrollo de la pequeña y mediana industria en el país.
Como segundo eje propuso la profunda "reforma de la Constitución Bolivariana" de Venezuela, la cual permitirá, entre otros aspectos, la modificación de artículos que en lo económico o en lo político pudieran dar lugar a equívocos debido a su redacción. A juicio de Chávez, la ley de leyes revolucionarias dependerá, de alguna manera y en algún grado, de esa reforma constitucional.

El tercer motor de la revolución es la jornada nacional denominada "Moral y Luces", que comprende una campaña de educación moral, económica, política y social que va más allá de las escuelas, pues estará presente en los talleres, en los campos, en los núcleos endógenos y demás entes populares.
Chávez denominó el cuarto motor como "la geometría del poder", integrado por la nueva manera de distribuir los poderes político, económico, social y militar sobre el espacio nacional, ya que propuso revisar la distribución político- territorial del país y generar la construcción de sistemas de ciudades y de territorios federales.
Esta propuesta representa una innovación en la búsqueda de una forma que se adapte mucho más a nuestra realidad y a nuestras aspiraciones', aseguró el Presidente, quien pidió a los gobernadores y alcaldes analizar estos sistemas de ciudades y territorios federales que propiciarían el desarrollo integral de las comunidades.
"La explosión revolucionaria del poder comunal" es el quinto motor constituyente, el cual, según el Mandatario Nacional, tiene mayor fuerza y dependerá del éxito de los anteriores ejes revolucionarios de esta nueva era de la administración pública.
Chávez instó a la Asamblea Nacional, a la Defensoría del Pueblo y a los demás poderes a hacer un esfuerzo sostenido y unitario para consolidar estos cinco motores.
"Entramos de lleno al tiempo de construcción del proyecto nacional Simón Bolívar, que requería un fundamento sólido, lo que hemos hecho hasta ahora es echar un piso sobre el cual construiremos el edificio, es el proyecto socialista bolivariano", acotó.

EL SOCIALISMO DEL SIGLO XXI DE HUGO CHAVEZ FRIAS


EL SOCIALISMO DEL SIGLO XXI DE HUGO CHAVEZ FRIAS
RESUMEN:
El propósito en general es construir una sociedad sin clases, razón por la cual en la actualidad la mayoría del socialismo se identifica con los postulados marxistas y comunistas. También se ha enfocado últimamente a las reformas sociales de las democracias modernas.
Para Hugo Chávez expresa lo siguiente "Hemos asumido el compromiso de dirigir la Revolución Bolivariana hacia el socialismo y contribuir a la senda del socialismo, un socialismo del siglo XXI que se basa en la solidaridad, en la fraternidad, en el amor, en la libertad y en la igualdad" en un discurso a mediados de 2006. Además, este socialismo no está predefinido. Más bien, dijo Chávez "debemos transformar el modo de capital y avanzar hacia un nuevo socialismo que se debe construir cada día".
INTRODUCCIÓN
El Socialismo del siglo XXI es un concepto del que se empieza a hablar a partir de enero de 2005, fue lanzado por el Presidente de Venezuela, Hugo Chávez, en el V Foro Social Mundial, en el marco de la revolución bolivariana, en su definición ha señalado que para llegar a éste habrá una etapa de transición que denomina como Democracia Revolucionaria.
Hugo Chávez expresó "Hemos asumido el compromiso de dirigir la Revolución Bolivariana hacia el socialismo y contribuir a la senda del socialismo, un socialismo del siglo XXI que se basa en la solidaridad, en la fraternidad, en el amor, en la libertad y en la igualdad" en un discurso a mediados de 2006. Además, este socialismo no está predefinido. Más bien, dijo Chávez "debemos transformar el modo de capital y avanzar hacia un nuevo socialismo que se debe construir cada día".A su juicio por las condiciones presentes en el actual mundo globalizado, esta transición será bastante prolongada. Dentro de este concepto sería definitivamente el socialismo el camino a seguir, contrario al neoliberalismo.
En el aspecto de ideológico y en cuanto al objetivo de la vida social, se ha llegado a determinar a qué tipo de socialismo se apunta, se ha aclarado relativamante cuando Hugo Chávez respondió a la jerarquía eclesiástica venezolana «Les recomiendo a los obispos que lean a Marx, a Lenin, que vayan a buscar la Biblia para que vean el Socialismo en sus líneas, en el viejo y nuevo testamento, en el sermón de la montaña.», durante el acto de juramentación de su nuevo gabinete ministerial, el 8 de enero de 2007.

En el mismo acto, Chávez indicó ser trotskista. Por esto se podría inferir que el Socialismo del siglo XXI posee elementos de ideologías tan diversas como el Marxismo-Leninismo, el trotskismo y el socialismo cristiano, aunque preservando prácticas del neoliberalismo tal como lo ha demostrado el proceso de concesiones de las empresas estatales a transnacionales privadas.
EL SOCIALISMO DEL SIGLO XXI
¿Qué es el socialismo?
El socialismo es una ideología política que designa aquellas teorías y acciones políticas que defienden un sistema económico y político, basado en la propiedad y administración de los sistemas de producción y en el control social (parcial o completo) de los sectores económicos y políticos. Sin embargo, en la práctica el significado de facto del socialismo ha ido cambiando con el transcurso del tiempo.
Aunque es un término político bastante cargado, permanece fuertemente vinculado con el establecimiento de una clase trabajadora organizada, creada ya sea mediante revolución o evolución social, con el propósito de construir una sociedad sin clases, razón por la cual en la actualidad la mayoría del socialismo se identifica con los postulados marxistas y comunistas.
También se ha enfocado últimamente a las reformas sociales de las democracias modernas. El concepto y término socialista se refieren a un grupo de ideologías, un sistema económico o un Estado que existe o existió.
Historia del Socialismo
El estudio del socialismo propiamente dicho suele iniciarse a partir de la Revolución Francesa en 1789, que supuso el derrocamiento de la clase feudal francesa y la ascensión al poder de la burguesía, y el período premarxista en la historia del socialismo, corresponde a los cien años aproximadamente (de mediados del siglo XVIII a mediados del siglo XIX) en los que los principales países de Europa desarrollan el proceso de sustitución del feudalismo por el capitalismo como sistema económico, y en el que los estados feudales se unen para formar las modernas Naciones-Estado.
A raíz de la Revolución Francesa, aparece François Babeuf, el primer pensador socialista (aunque en su época esta palabra no se utilizaba todavía) que se pone a la cabeza de un movimiento llamado la Conspiración de los Iguales.
Por su parte Inglaterra fue la cuna del socialismo utópico y reformador en la primera mitad del siglo XIX. Existen dos causas importantes que dan al socialismo utópico inglés su carácter peculiar: la revolución industrial con su cortejo de miserias para el naciente Proletariado y el desarrollo de una nueva rama de la ciencia : la economía política. Recordemos entre los socialistas utópicos a Robert Owen (1771-1858), que fue el primero en considerar al proletariado como clase independiente con intereses comunes.
En Francia el utopismo tuvo un carácter más filosófico que en Inglaterra. Su primer representante fue el conde Henri de Saint-Simon (1760-1825). Propuso la Federación de Estados Europeos, como instrumento político para evitar las guerras y asegurar la paz mundial. Al mismo tiempo Carlos Fourier, (1772-1837), concibió los falansterios-comunidades humanas regidas por normas de libre acuerdo y economía socializada. De la inspiración de los principios fourieristas se constituyeron algunos falansterios. Otro utopista francés fue Étienne Cabet (1778-1856), que durante su destierro en Inglaterra, en el año 1842, escribió Viaje a Icaria.
Poco después aparece la teoría marxista que se refiere a la sociedad que debe sustituir al capitalismo, y en algunos casos desarrollarse en comunismo. El marxismo y comunismo son dos ramas muy específicas del socialismo. Las dos no representan al socialismo como un todo. Entre los marxistas hubo una división entre los socialistas democráticos y los revolucionarios. En la teoría moderna del socialismo democrático, se aspira a llegar a una sociedad democrática que sea la columna vertebral de un Estado de bienestar.
El socialismo libertario es una corriente del socialismo que busca que las personas decidan sobre sus vidas directamente, y en el caso del anarquismo propugna la abolición del Estado y de toda autoridad. Es la corriente con un trasfondo de respeto y valoración al sujeto o individuo, y que considera a la libertad como el camino y el objetivo del socialismo y que propone la horizontalidad en las relaciones humanas, la autonomía local junto con la autoorganización de los movimientos sociales frente a las instituciones del Estado y a las multinacionales y monopolios propios del capitalismo. La meta del socialismo libertario es construir una sociedad basada en las libertades civiles, la equidad social, la iniciativa individual, la cooperación voluntaria, eliminando las clases sociales estratificadas, promoviendo estructuras políticas y económicas autogestionarias, descentralizadas o distribuídas.
Una ideología, un grupo de ideologías
Existen algunas grandes diferencias entre los grupos socialistas, aunque casi todos están de acuerdo de que están unidos por una historia en común que tiene sus raíces en el siglo XIX y el siglo XX, entre las luchas de los trabajadores industriales y agricultores, operando de acuerdo a los principios de solidaridad y vocación a una sociedad igualitaria, con una economía que pueda, desde sus puntos de vista, servir a la amplia población en vez de a unos cuantos.
De acuerdo con los autores marxistas (más notablemente Friedrich Engels), los modelos y las ideas socialistas serían rastreables los principios de la historia social humana, siendo una característica de la naturaleza humana y los modelos sociales humanos.
En el marxismo-leninismo el socialismo es considerado como la fase previa al comunismo, por ello los procesos revolucionarios vividos por la URSS, Cuba y China se relacionan con esta doctrina, ya que, en el caso de la URSS nunca se logró alcanzar el comunismo, y en el caso de Cuba todavía se lucha para alcanzar ese objetivo.
Presidente Chávez define Socialismo del siglo XXI
El Presidente Chávez formuló su pensamiento sobre el Socialismo del Siglo XXI.
Confiesa que para él sólo el Socialismo puede traer justicia social.
El primer elemento que dibuja sobre el Socialismo del siglo XXI es su estrecha relación con la practica política que comenzó allá por los años 80 con el diseño de lo que llamaron el 'árbol de las tres raíces', que es la fuente ideológica. Consiste en la raíz bolivariana (su planteamiento de igualdad y libertad, y su visión geopolítica de integración de América Latina); la raíz zamorana (por Ezequiel Zamora, el general del pueblo soberano y de la unidad cívico-militar) y la raíz robinsoniana (por Simón Rodríguez, el maestro de Bolívar, el Robinson, el sabio de la educación popular, la libertad y la igualdad). Este 'árbol de las tres raíces' da sustancia ideológica al movimiento revolucionario y al Socialismo del siglo XXI.
En esta larga experiencia la conciencia y el pensamiento del Presidente Chávez ha recibido también la influencia del Marxismo Referencia ineludible del socialismo moderno. Señala que el de ahora debe ser un Socialismo nuevo. El 'Socialismo del siglo XXI', sobre el cual esboza ideas precisas.
Una es afirmar que el primer socialista de nuestra era fue Cristo. El Socialismo debe nutrirse de las corrientes más auténticas del cristianismo. Haremos el Socialismo desde nuestras propias raíces, desde nuestros aborígenes y cita experiencias como: 1) las comunas en Paraguay y Brasil; 2) el socialismo utópico que representó Simón Rodríguez; 3) el planteamiento de Bolívar de libertad e igualdad; 4) los planteamientos de Artigas, el gran uruguayo, de que hay que invertir el orden de la justicia, eliminando los privilegios.
Entre los elementos que pudieran definir el Socialismo del siglo XXI, dice el Presidente Chávez, están los siguientes:
a) La moral.
El primer rasgo es el moral. Debemos recuperar el sentido ético de la vida. Luchar contra los demonios que sembró el capitalismo: individualismo, egoísmo, odio, privilegios. Es un arma en la lucha contra la corrupción, un mal que es propio del capitalismo. El socialismo debe defender la ética, la generosidad.
b) La democracia participativa.
En el aspecto político uno de los factores determinantes del Socialismo del siglo XXI debe ser la democracia participativa y protagónica. El poder popular. Hay que centrar todo en el pueblo, el partido debe estar subordinado al pueblo.
c) Igualdad conjugada con la libertad.
En lo social, el Socialismo debe conjugar igualdad con libertad. Una sociedad de incluidos, de iguales, sin privilegios.
d) Cooperativismo y asociativismo.
En lo económico: un cambio del sistema de funcionamiento metabólico del capital. En Venezuela se han iniciado experimentos como el impulso al cooperativismo, al asociativismo, a la propiedad colectiva, a la banca popular y núcleos de desarrollo endógeno. Son válidas muchas experiencias como la autogestión y cogestión, la propiedad cooperativa y colectiva. Se esta poniendo en marcha un ensayo de empresas de producción social y unidades de producción comunitaria.
El Socialismo del Siglo XXI ofrece como su mejor resultado hasta el momento, un impresionante experimento de PODER POPULAR en el que participan millones de personas, como no lo habían hecho antes en la historia de la nación, contagiando el resto de los pueblos suramericanos que han vuelto su mirada al modelo socialista ante el estrepitoso fracaso del neoliberalismo.
A las anteriores reflexiones el Presidente agrega la siguiente: estamos en una transición. Una transición que llama 'Democracia Revolucionaria'. Ha retomado ese término para caracterizar el tipo de democracia que empuja como una caballería, que abre puertas y se impregna de pueblo. Es una fase de transición hacia el socialismo.
El Presidente propone redactar con estas ideas el Manifiesto del Socialismo del Siglo XXI. Con otros camaradas hemos tomado la determinación de avanzar en esa dirección. Para tal efecto ha sido creado el Instituto del Pensamiento del Socialismo del Siglo XXI, donde se profundizaran todos estos elementos y se difundirán entre las organizaciones populares, para elevar así su nivel de conciencia y acción revolucionaria.
El socialismo del siglo XXI fue forjado en Cuba
En Cuba se instaura un Estado Socialista a partir de 1959, con base en los principios del marxismo-leninismo, que consagra al Estado socialista, y al Partido Comunista como herramienta fundamental en orden a la obtención de los fines perseguidos, y en la cual se observan algunas influencias, formales y substanciales de las Constituciones de la República Popular China, de la Unión Soviética y de las entonces repúblicas socialistas-marxistas de Alemania, Rumania y Checoslovaquia.
El propósito que animaba a la mayoría de la oposición cubana durante la lucha contra la dictadura de Batista, era el regreso a la democracia y la restitución de la Constitución de 1940, inspirada en la de la república española, en la alemana de Weimar y en la mexicana de 1917, de allí que se le considerara la más progresista del continente, Por cierto redactada y puesta en vigor durante el primer gobierno de Batista, quién además de legalizar el Partido Comunista, dispuso que dos altos miembros de éste formaron parte de su gabinete. Asesinada por el propio Fulgencio Batista tras el golpe de Estado de 1952 que quiebra el proceso civilista y democrático: fractura a la que Fidel Castro dio continuidad. Pero, tras la toma de poder de 1959, ante la imposibilidad del castrismo de declararla "moribunda", se procede de inmediato a su modificación: imposición de la pena de muerte; se decreta la retroactividad de la Ley Penal; y se suspende el derecho de Habeas Corpus.
Las modificaciones continúan sucediéndose hasta que en 1976 se promulga una nueva Constitución que finalmente deroga a la de 1940. Un caso único en la historia constitucional del continente, y una demostración del colonialismo voluntario: la Constitución recoge en su texto la gratitud cubana a la URSS. Fue el período de mayor identificación con el modelo soviético. La alianza entre ambos, tomaba así la forma de un matrimonio indestructible.
La fase de la institucionalización de la revolución, designa el año 1977 como "Año de la institucionalización". Se comienza el proceso de elección de los representantes del poder popular, se fija una candidatura única, apoyada por un solo partido, el Partido Comunista de Cuba. Fidel Castro es elegido Presidente del Consejo de Estado. Se eligen los miembros de los Consejos Municipales, y los diputados a la Asamblea Nacional del Poder Popular. Se procede a una nueva división territorial de la isla. Desaparecen provincias, aparecen otras que llevan los nombres del nuevo panteón épico revolucionario.
Cuba se rigió según esas mismas normas constitucionales hasta el colapso de la URSS, cuando se vio obligada a iniciar un proceso de reformas legislativas para adaptar el sistema institucional al contexto de la Post Guerra Fría. El principio rector de un régimen totalitario comunista se mantiene en el nuevo texto constitucional que establece que el Partido Comunista es "la fuerza dirigente superior de la sociedad y del socialismo y el avance hacia la sociedad comunista".
No obstante aparecen cambios sutiles en lugar de ser "la vanguardia organizada marxista-leninista de la clase obrera", los lineamientos se orientan hacia la defensa del patrimonio nacional surgido de la revolución cubana, se pone el acento en el principio de soberanía, se le da mayor visibilidad al nombre de José Martí. Se impone el nacionalismo revolucionario por sobre la adhesión al marxismo-leninismo. Se decreta la Declaración de los mambis del siglo XX, firmada por más de 250.000 oficiales de la FAR y la Declaración y la Ley de Dignidad y Soberanía Cubana.
Los desplazamientos retóricos – nacionalistas no significan el abandono del socialismo y del partido único, sino que el socialismo es convertido en un valor nacional. El sentido de pertenencia nacional comporta el sentido anti-capitalista. Es así como, la modificación constitucional "propuesta" a la Asamblea nacional del poder popular por las organizaciones de masa, enteramente subordinadas al partido comunista, mediante la tan útil y rentable cláusula constitucional del referéndum, consagro el socialismo como sistema social irrevocable.
Esa fue la respuesta a la iniciativa de reforma constitucional de un grupo opositor pacifista, el llamado Proyecto Varela, que en 2002 invocando la misma cláusula, pese a la represión policial, había recogido 11.000 firmas estipuladas por la Constitución. Ante los 8.198.237 que dijeron "si al socialismo irrevocable"…
Esta nueva fase ambigua del régimen cubano, es la inspiradora del llamado Socialismo del Siglo XXI; de allí la facultad de asirlo con los únicos instrumentos teóricos del marxismo, o del leninismo. Es un artefacto mestizo, muy similar a un altar del culto de María Lienza o también similar a la hallaca.
Como dice Meter Sloterdijk: se ha condenado por ley el fascismo, pero mientras se continúe admitiendo la auto-amnistía de los crímenes de la izquierda, continuaremos bajo el imperio de la ignorancia ingenua de unos y de la mala fe de otros. Ésa cláusula constitucional aún no ha sido prevista por ninguna constitución.

Entre los principios fundamentales de la constitución Cubana podemos extraer:
Principios Políticos:
- Se consagra el poder carismático del líder, en este caso de Fidel Castro.
- Se ratifican los principios de la revolución.
- El establecimiento de una sociedad socialista.
- Aceptación e implantación de marxismo-leninismo.
- Rectoría del Partido Comunista en la construcción del socialismo y el avance hacia la sociedad comunista.
- Atribución del poder del Estado a los trabajadores.
- Fidelidad a la Unión Soviética e integración al mundo socialista.
- Condena al imperialismo y solidaridad antiimperialista.
- Condena a la guerra de agresión y reconocimiento de las guerras de liberación nacional y la resistencia armada
- Propósitos de paz y de integración regional.
Principios Sociales:
- Se le rinde culto a José Martí.
- La libertad individual. ***
- Inviolabilidad de la integridad personal ***
- Libertad de expresión y religiosa. ***
- Derecho de reunión, asociación y manifestación. ***
- Reconocimiento del derecho de asilo bajo ciertas condiciones.
- Defensa del medio ambiente.
- Protección de las instituciones familiares, la niñez, la juventud, la vejez, el desamparo y la salud.
- Consagración de la igualdad jurídica de los hijos y garantía de reconocimiento de la paternidad.
- Derecho a la educación integral.
- Eliminación de la educación privada.
- Adoctrinamiento comunista en las nuevas generaciones.
- Gratuidad de la enseñanza.
- Sometimiento a la creación artística a criterios revolucionarios.
- Igualdad jurídica y social de los ciudadanos.
- Igualdad jurídica del trabajo.
- Igualdad jurídica, económica, política, social y familiar de la mujer.
- Enaltecimiento del trabajo.
- Consagración del trabajo voluntario como formador de la conciencia comunista.
- Condicionamiento general del ejercicio de las libertades reconocidas a la existencia y fines del Estado -
- Socialista y a la construcción del socialismo y del comunismo.
- Derecho de petición
- Defensa de la patria socialista como deber y honor.
- Fomento y promoción de la cultura física y el deporte. (Si no a Cortar Caña)
- Promoción de la participación ciudadana en el campo educativo y cultural.
Principios Económicos:
- Concepción Socialista de la economía basada en la propiedad socialista de todo pueblo sobre los medios de producción fundamentales.
- Supresión de la explotación del hombre por el hombre.
- Ejercicio de la soberanía sobre los recursos naturales del espacio marítimo
- Reconocimiento de ciertas formas de propiedad privada.
Prohibición del arrendamiento y otras formas de explotación de la propiedad de agricultores pequeños sobre fincas rústicas.
- Reconocimiento de la propiedad colectiva campesina.
- Reconocimiento del derecho a la herencia.
- Confiscación de bienes exclusivamente como sanción.
- Desde 1991 Cuba a permitido la apertura al capital extranjero bajo la condición de empresas mixtas.
La concepción del Estado socialista en la constitución cubana, es el de un instrumento de que se vale el pueblo trabajador para ejercer el poder, este poder a su vez, se sustenta en la alianza de la clase obrera con los campesinos y las demás capas trabajadoras de la ciudad y el campo, bajo la dirección de la clase obrera. El partido comunista es la fuerza dirigente superior del Estado, ya que se le entiende como la "vanguardia organizada marxista-leninista de la clase obrera, que organiza y orienta los esfuerzos comunes hacia los altos fines de la construcción del socialismo y el avance hacia el futuro comunista".
Cinco motores constituyentes para construir el socialismo, propuso Chávez al tomar posesión
Primer Motor: Ley Habilitante. Vía directa al socialismo
Segundo Motor: Reforma Constitucional. Estado de derecho socialista
Tercer Motor: Moral y Luces. Educación con valores socialistas
Cuarto Motor: La Nueva Geometría del poder. El reordenamiento socialista
de la geopolítica de la Nación
Quinto Motor: Explosión del Poder Comunal. Democracia protagónica,
REVOLUCIONARIA Y SOCIALISTA
Con la intención de continuar el camino acertado del Poder Constituyente que despertó en 1999, el presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Hugo Chávez Frías, propuso lo que denominó como los "cinco motores constituyentes" para avanzar hacia el socialismo del siglo XXI.
Durante su discurso, luego de ser investido para su segundo período presidencial, Chávez explicó que el primer eje contempla la propuesta de la "Ley Habilitante", que permitirá al Ejecutivo legislar sobre las materias necesarias para adelantar los cambios hacia el socialismo. El presidente Chávez solicitó facultades para legislar en 10 áreas de carácter estratégico, entre las cuales destacan la economía, finanzas, actividad social, cultura, seguridad y defensa.
Según expertos, la Ley Habilitante tendrá una vigencia de 18 meses a partir de su publicación en la Gaceta Oficial y concede al estadista las facultades para aprobar decretos y normativas con rango y fuerza de ley.
El vicepresidente del país, Jorge Rodríguez, adelantó que en un plazo de tres meses estarán redactados y modificados todos los instrumentos legales del citado mecanismo. Rodríguez estimó que en el marco de la Habilitante se elaborarán entre 40 y 60 leyes, con vistas a impulsar la construcción del nuevo proyecto nacional de carácter socialista.
En el ámbito financiero, el propósito esta en profundizar y adecuar el sistema financiero público y privado a los principios constitucionales, apoyado en la modernización del marco regulatorio para los sectores monetario, banca, seguros, tributario e impositivo. Asimismo, en materia de economía se dictarán regulaciones que preserven la función social de la propiedad -en sus diversas formas y clases-, así como el fomento de la producción y desarrollo de la pequeña y mediana industria en el país.
Como segundo eje propuso la profunda "reforma de la Constitución Bolivariana" de Venezuela, la cual permitirá, entre otros aspectos, la modificación de artículos que en lo económico o en lo político pudieran dar lugar a equívocos debido a su redacción. A juicio de Chávez, la ley de leyes revolucionarias dependerá, de alguna manera y en algún grado, de esa reforma constitucional.

El tercer motor de la revolución es la jornada nacional denominada "Moral y Luces", que comprende una campaña de educación moral, económica, política y social que va más allá de las escuelas, pues estará presente en los talleres, en los campos, en los núcleos endógenos y demás entes populares.
Chávez denominó el cuarto motor como "la geometría del poder", integrado por la nueva manera de distribuir los poderes político, económico, social y militar sobre el espacio nacional, ya que propuso revisar la distribución político- territorial del país y generar la construcción de sistemas de ciudades y de territorios federales.
Esta propuesta representa una innovación en la búsqueda de una forma que se adapte mucho más a nuestra realidad y a nuestras aspiraciones', aseguró el Presidente, quien pidió a los gobernadores y alcaldes analizar estos sistemas de ciudades y territorios federales que propiciarían el desarrollo integral de las comunidades.
"La explosión revolucionaria del poder comunal" es el quinto motor constituyente, el cual, según el Mandatario Nacional, tiene mayor fuerza y dependerá del éxito de los anteriores ejes revolucionarios de esta nueva era de la administración pública.
Chávez instó a la Asamblea Nacional, a la Defensoría del Pueblo y a los demás poderes a hacer un esfuerzo sostenido y unitario para consolidar estos cinco motores.
"Entramos de lleno al tiempo de construcción del proyecto nacional Simón Bolívar, que requería un fundamento sólido, lo que hemos hecho hasta ahora es echar un piso sobre el cual construiremos el edificio, es el proyecto socialista bolivariano", acotó.

ERASMO DE ROTTERDAM


ERASMO DE ROTTERDAM


Vida

Nació el 26 o 27 de octubre, probablemente de 1466, en Rotterdam, hijo ilegítimo de un sacerdote, Roger Gerard, y de la hija de un médico. Asistió a severos colegios monásticos en Deventer y Hertogenbosch y, después de la muerte de su padre, se hizo agustino en Steyn. En 1492 se ordenó sacerdote y trabajó para el obispo de Cambray, estudiando las filosofías escolástica y griega en la Universidad de París. Disgustado por la vida sacerdotal, buscó un empleo secular, y más tarde recibió la dispensa papal para vivir y vestir como erudito laico.
Desde 1499 viajó incansablemente de ciudad en ciudad trabajando como profesor y conferenciante, escribiendo constantemente e investigando manuscritos antiguos. Mantuvo una voluminosa correspondencia -se conservan más de mil quinientas cartas- con importantes personajes de la época. A lo largo de cuatro viajes a Inglaterra trabó amistad con eruditos de la nueva enseñanza humanista como John Colet, fundador del colegio Saint Paul de Londres, Thomas Linacre, fundador de la Real Universidad de Medicina, Tomás Moro, escritor y Lord Canciller de Inglaterra, y William Grocyn, profesor de griego en Oxford. Él mismo enseñó griego en Cambridge, con lo que contribuyó al establecimiento del humanismo en Inglaterra, y en especial, al desarrollo de los estudios clásicos en la enseñanza cristiana. Mientras estuvo en Italia se doctoró por la Universidad de Turín y se hizo amigo del editor veneciano Aldo Manuzio. En la ciudad suiza de Basilea fue amigo y redactor del editor Johann Froben y en esta misma ciudad murió el 12 de julio de 1536.

Obras
La obra de Erasmo pone de manifiesto su enorme erudición y elegante estilo latino, que amenizaba con paciencia e ingenio. Adagios (1500, ampliados en 1508), una recopilación de proverbios latinos, estableció su reputación como erudito. La mayor parte de sus primeras obras atacan las prácticas corruptas de la Iglesia y el escolasticismo racionalista fomentado por los clérigos. En Manual del caballero cristiano (1503) y su famosa sátira Elogio de la locura (Encomion moriae seu laus stultitiae, 1511), que dedicó a Moro, aboga por una vuelta a la primitiva ética cristiana. Aunque su obra más trascendente fue la traducción al griego del Nuevo Testamento (1516), basado en manuscritos nuevos, con notas críticas y acompañada de una nueva traducción latina, que demostraba lo poco rigurosa que era la Vulgata latina. Por estas obras, que influyeron a los reformadores religiosos de la época, se le llama padre de la reforma.
Erasmo expuso sus opiniones progresistas acerca de la educación en Sobre el método del estudio (1511) y La enseñanza firme pero amable de los niños (1529). Sostenía que el latín elemental y el cristianismo básico han de enseñarse en el hogar antes de empezar el bachillerato formal a los siete años. El latín también debía enseñarse primero de manera coloquial y después a través de la gramática, un método similar a las técnicas actuales de enseñanza. También es avanzada su defensa de la educación física, su crítica a la disciplina severa y su insistencia en despertar el interés de los alumnos.

En 1517, cuando la reforma se convirtió en un tema candente bajo el liderazgo decidido de Martín Lutero, la vida intelectual de Erasmo cambió de dirección. Hasta entonces admirado y temido como crítico, se volvió apologista, en realidad sin confiar en los católicos ni en los reformistas y siempre rehusando tomar partido. Siguió siendo católico aunque con frecuencia se asoció con los reformistas. Por los continuos ataques, en sus Coloquios (1518), a los males y errores de las autoridades eclesiásticas y a las supersticiones le acusaron de luterano, acusación que negó con vehemencia. También le acusaron de disimular sus verdaderas opiniones por miedo a las consecuencias. Para rebatirlo escribió una declaración completa de su posición teológica, Disquisición acerca del libre albedrío (De libero arbitrio, 1524), que incluye un ataque brillante a Lutero. El contraataque de Lutero provocó una polémica final de Erasmo, Hyperaspistes (1526). Mientras tanto preparó muchas ediciones eruditas de las obras de los padres de la iglesia con el editor Froben.
Aunque se le considera precursor de la Reforma y sus obras fueron incluidas en el Indice de Obras Prohibidas por el Concilio de Trento, su guerra contra la ignorancia y la superstición procede más de sus convicciones de humanista que como teólogo. Después de su muerte sus obras fueron prohibidas por la Iglesia católica y denunciadas por muchos protestantes, pero anticiparon la tolerancia en los Países Bajos y las obras de Voltaire, Anatole France, Bertrand Russell y otros. No fue un reformador religioso, como Lutero y Calvino, ni quiso participar en discusiones teológicas; fue un auténtico hombre de letras y, como humanista, un precursor de la época. Existe una Universidad Erasmo en Rotterdam y la red de la Comunidad Europea para los intercambios académicos se llama ERASMUS en su honor.